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Introduction
Introducción
Day
Week
Día
18
Uno de los problemas más grandes que enfrentamos, es poder escuchar claramente la voz de Dios. Tenemos muchas decisiones que tomar diariamente y sabemos que Dios tiene un plan para nosotros; sin embargo, batallamos para escuchar a Dios claramente. Todos queremos oír de Dios, pero aún así, seguimos viviendo esa vida desordenada y RUIDOSA; hace que nos sea muy difícil poder escuchar Su voz.
El otro día hice un viaje con mi familia, y estábamos en nuestro camino a Dallas para participar en la boda de un miembro de la familia. Un artículo muy importante que llevo conmigo en cada viaje, es un par de audífonos con reducción de ruido. Sí, has leído bien. Soy un padre conduciendo por la carretera llevando audífonos como una manera de encontrar paz y serenidad! ¿He mencionado que tengo tres hijos menores de 10 años de edad? Entre tanto que estaba disfrutando de mi lista de alabanzas, miré en el espejo para ver a mis hijos argumentando sobre quién tendría el iPad cuando ellos veían una película. En ese momento, me di cuenta de cuánto me encantaban mi audífonos. ¡Yo escuchaba NADA! Lo único que oía, era lo que había seleccionado para escuchar en mi lista - ¡ah, que serenidad! Dios me habló en ese momento y me recordó lo ruidosa que es mi vida. Lo ruidoso que son mis días. ¡Lo ruidosa que he PERMITIDO que sea mi vida!
Porción Bíblica Para Hoy
1 Reyes 19:11-12 (NVI) - "11 El Señor le ordenó: —Sal y preséntate ante mí en la montaña, porque estoy a punto de pasar por allí. Como heraldo del Señor vino un viento recio, tan violento que partió las montañas e hizo añicos las rocas; pero el Señor no estaba en el viento. Al viento lo siguió un terremoto, pero el Señor tampoco estaba en el terremoto. 12 Tras el terremoto vino un fuego, pero el Señor tampoco estaba en el fuego. Y después del fuego vino un suave murmullo."
Video en Right Now Media
Posiblemente tu vida se sienta así: ¿Usted está escuchando?(Are You Listening?)
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Sugerencia de Wade
En la escritura de arriba, vemos cómo Dios nos habla a menudo a ti y a mí. ¡Todos podemos ser culpables de vivir una vida ruidosa! A menudo somos como Elías, buscando a Dios en el espectáculo. Esperando que Dios nos grite sus planes y propósitos a nuestra manera. Pero Dios no estaba en el viento o el terremoto, o incluso en el fuego. Su voz estaba en un suave susurro! Me pregunto cuántas veces Dios está susurrando y no le escuchamos. Me pregunto cuántas veces perdemos la voz de Dios entre el ruido. Entre más guardemos silencio, más escucharemos a Dios hablar a nosotros. Nuestro Padre es un Dios relacional y Él anhela revelar su corazón y sus propósitos para nosotros. Cuando por completo no escuchamos de él, por lo general, el problema está en nosotros, que no estamos en un lugar que sea lo suficientemente tranquilo como para escucharlo. Al ir caminando hoy con Dios, toma algún tiempo para estar en silencio delante de Él. Separa un momento en quietud, encuentra un lugar tranquilo, y cultiva un corazón quieto. Es en esa zona, la zona libre de ruido, donde escuchamos lo que Dios ha estado tratando de decir a todos, a lo largo del camino.
Sugerencias para Estudiar
Lee 1 Reyes 19 (NVI). Por qué crees que Dios habló a Elías en un susurro?
Wade Smith
Edmond
Campus Pastor
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