Ver y Esperar

ESCRITURA ENFOCADA EN ESTA SEMANA

Juan 11: 21-22 (NVI) 21 —Señor —le dijo Marta a Jesús—, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto. 22 Pero yo sé que aun ahora Dios te dará todo lo que le pidas.

Juan 11:32 (NVI) 32 Cuando María llegó adonde estaba Jesús y lo vio, se arrojó a sus pies y le dijo: —Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto.‍

PENSAMIENTOS DE BARB‍

Tanto Marta como María creyeron en Jesús para sanar a su hermano, pero ambas cuestionaron por qué esperó dos días antes de que decidiera venir. Jesús amaba mucho a esta familia, pero esperó y les pidió que vigilaran y vieran la gloria de Dios.

Se necesita más fe para esperar y ver cómo Dios quiere desenredar nuestros problemas. Queremos una solución rápida y rápida, pero muchas veces, cuanto más tenemos que esperar, se revela cuánto realmente confiamos o no confiamos en Dios. Prueba lo que realmente creemos. ¿Confiamos en que Él está en control de nuestra situación? ¿Podemos quedarnos quietos y escuchar lo que Él tiene para nosotros?

Romanos 5:2b-5 “...Así que nos regocijamos en la esperanza de alcanzar la gloria de Dios. 3 Y no solo en esto, sino también en nuestros sufrimientos, porque sabemos que el sufrimiento produce perseverancia; 4 la perseverancia, entereza de carácter; la entereza de carácter, esperanza. 5 Y esta esperanza no nos defrauda, porque Dios ha derramado su amor en nuestro corazón por el Espíritu Santo que nos ha dado”.

Jesús no defraudó a Marta y María. Tenía un plan más grande que el de ellos. Durante todo el resto de la lectura de Juan de esta semana, continuarás escuchando sobre el testimonio de Lázaro y sobre cómo él se resucitó de entre los muertos por todas partes. Muchas personas salieron a encontrarse con Jesús y lo siguieron. Cuando confiemos en Dios para ver y esperar, veremos una imagen más amplia del plan de Dios de desenredar nuestros problemas. Sus caminos son más altos y mejores que los nuestros y le glorifican

Isaías 40:31 dice: “pero los que confían en el Señor renovarán sus fuerzas; volarán como las águilas: correrán y no se fatigarán, caminarán y no se cansarán”.