Más que un momento

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Hace muchos años, viví una experiencia muy peculiar. Mi esposa y yo éramos pastores de jóvenes y directores del grupo de alabanza de una iglesia en una ciudad que se encuentra en el sur de Texas. Una mañana, recibí instrucciones de permitir que el grupo de mujeres de la iglesia participaran en la dirección de un programa especial. Todo iba bien hasta el momento en que una persona, que formaba parte del liderazgo de este ministerio, se acercó a mí con una gran determinación y dijo con firmeza, "voy a enseñarles lo que es un verdadero avivamiento; ¡vamos a cantar canciones viejitas! Me gusta el avivamiento al estilo antiguo…" Yo no estaba en contra de su estilo o la antigüedad de las canciones, ¡pero me sorprendió que ella le llamó “avivamiento” a un estilo y una época en el tiempo!

Es triste que lleguemos al punto de pensar que un avivamiento es algo que se vive durante unos minutos y en un lugar específico. ¿te has preguntado alguna vez lo qué significa avivamiento, para Dios?

Literalmente, es algo que debemos vivir en cada momento de nuestras vidas, sin importar las circunstancias.

Te invito a vivir, a partir de hoy, una relación constante con Dios, de manera que sea auténtica y fructífera. ¡Decide vivir, cada día de tu vida, en compromiso con algo que te haga sentir la necesidad de amar y apreciar todo lo que Él es para ti!

Por favor considera este versículo de la Palabra de Dios; te ayudará de una manera especial:

Pues el Señor es el Espíritu, y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad. Así que, todos nosotros, a quienes nos ha sido quitado el velo, podemos ver y reflejar la gloria del Señor. El Señor, quien es el Espíritu, nos hace más y más parecidos a él a medida que somos transformados a su gloriosa imagen. - 2 Corintios 3:17-18 NTV